lunes, 31 de enero de 2011

¿Qué pide Dios de nosotros?

¿Qué pide Dios de nosotros?
Miqueas 6:8

Miqueas 6:8 Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.


Dios pide de nosotros justicia, misericordia y humildad ante Él.

Justicia y misericordia son elementos propios de la naturaleza de Dios que yo debo procurar, a fin de tener una relación correcta con mis semejantes.

Ser humilde ante Dios me da la posibilidad de tener la perspectiva adecuada de quién es Dios con respecto a mí. Como complemento, Santiago 4:10 señala que tener esta actitud permitirá que Dios nos exalte.

miércoles, 19 de enero de 2011

Dios está en medio nuestro

Dios está en medio nuestro
Sofonías 3:17

Sofonías 3:17 Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos.

Una de las verdades más interesantes que nos habla la Biblia es que Dios está en medio de cada uno de nosotros. Sofonías agrega algunos detalles alentadores dado que dice que esta permanencia de Dios es alegre, tanto es así que hasta se regocija con cánticos.

La reflexión de hoy es para que pensemos si nuestra actitud es similar a la de Dios en lo que respecta a nuestra relación con Él. Deberíamos estar también gozosos por esa cercanía con nuestro Padre.

sábado, 8 de enero de 2011

Bendito aquel que confía en Dios

Bendito aquel que confía en Dios
Jeremías 17:7-8

Jeremías 17:7 Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová.
Jeremías 17:8 Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto.

El versículo 8 nos indica el motivo por el cual aquella persona que confía en Jehová es bendita. Este motivo se refiere a que no importan las circunstancias de la vida, si confiamos en Dios nos mantendremos tranquilos, con fuerzas y dando fruto.

Las escrituras son muy reiterativas en recomendarnos confiar en Dios para recibir muchas de sus promesas. No obstante, esta confianza a veces es trasladada hacia uno mismo, a otras personas, posesiones, etc.

Es importante que hagamos el propósito de mentalizarnos a confiar en Dios. Para esto, se requiere mantener una estrecha relación con Dios y perseverar en ella.